Colombia fue consolidado nuevamente como el mayor productor mundial de cocaína, con cifras récord en 2023 según el Informe Mundial sobre Drogas 2025 de la ONU. La producción habría alcanzado las 3.708 toneladas, un 34% más que en 2022, y se dijo que sería debido principalmente a la expansión de cultivos de hoja de coca, que sumaron 253.000 hectáreas. Las zonas con mayor aumento se concentrarían en el suroeste del país, donde actúan disidencias Farc que no firmaron el acuerdo de paz y operan ejerciendo control en territorios rurales. A propósito, el Presidente Gustavo Petro catalogó el informe como “trampilla” y manifestó que dudaría sobre los datos presentados. Según él, el aumento no se debería a una expansión masiva de cultivos, sino a cambios en las técnicas agrícolas. Además, cuestionó la eficacia y motivaciones detrás del uso de glifosato, insinuando que presuntamente habría intereses económicos en promover su uso pese a que, según él, no sería una solución efectiva. Criticó también la política antidrogas tradicional y sugirió que el informe podría tener un trasfondo comercial más que técnico, asegurando que se estaría haciendo “negocio” con el glifosato en Colombia y otros lugares.
A nivel global, el consumo de drogas habría sido por parte del 6% de la población adulta entre 15 y 65 años, lo que equivale a unos 316 millones de personas. El cannabis sigue siendo la droga más utilizada, con 244 millones de usuarios, seguido por los opioides (61 millones), las anfetaminas (30,7 millones), la cocaína (25 millones) y el éxtasis (21 millones). Además, ha habido una notable expansión de estupefacientes sintéticos en la última década, favorecida por la digitalización y el acceso en línea a estas sustancias. No obstante, el informe advierte que más personas estarían consumiendo drogas desde edades más tempranas y que trastornos asociados al consumo afectarían a unos 63 millones de personas. Los opioides serían los más letales: en Estados Unidos, el fentanilo y otras sustancias sintéticas habrían causado la mayoría de las más de 100.000 muertes por sobredosis en 2023. En otras regiones, preocuparía el 'paco' en América del Sur, la heroína en Europa del Este, el tramadol en África Occidental y la metanfetamina en el sudeste asiático.
Finalmente, la ONU ha criticado que los enfoques punitivos (castigo, sanción...) seguirían predominando sobre las estrategias de prevención y salud pública, y que solo uno de cada cinco consumidores con problemas graves accedería a tratamiento. Las mujeres enfrentarían una doble estigmatización: solo el 5,5% de las que sufren trastornos por consumo recibiría atención, frente al 13,6% de los hombres. El temor a perder la custodia de sus hijos y la discriminación reducirían aún más sus posibilidades de buscar ayuda, según reportó DW. El debate sobre el consumo de drogas a nivel global es complejo.
Vía: DW • AFP • EFE • Infobae
