La Procuraduría General de la Nación solicitó prisión domiciliaria para los exministros Ricardo Bonilla y Luis Fernando Velasco, investigados por presuntos actos de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd). El Ministerio Público habría coincidido con la Fiscalía en que, por la 'gravedad' de las pruebas recaudadas, esta sería la medida 'más adecuada', aunque aclaró que no representarían 'riesgo de fuga', por lo que no sería necesaria la reclusión en un centro carcelario. En este caso, esta decisión podría implicar restricciones de visitas y comunicaciones, mientras la defensa insiste en que ambos enfrenten el proceso en libertad. Bonilla y Velasco fueron imputados por 'concierto para delinquir, cohecho e interés indebido en la celebración de contratos'. Según la Fiscalía, habrían liderado un 'entramado criminal' para desviar contratos de la Ungrd y del Invías, en lo que pretendería 'ofrecerlos a congresistas' a cambio de apoyo a proyectos del Gobierno Nacional en el Congreso. El ente acusador sostiene que se habrían comprometido 79 proyectos por cerca de $612.000 millones, aunque solo siete se habrían concretado.
En medio de este proceso, Velasco aseguró ante el Tribunal Superior de Bogotá que la Presidencia de la República, a través de Laura Sarabia, supuestamente le pidió nombrar a Olmedo López en un cargo directivo de la Ungrd. Según su testimonio, se habría negado a cumplir esa instrucción en abril de 2023, cuando estuvo encargado de la entidad, tras conocer personalmente a López, a quien hoy se señala como el principal responsable del desfalco. El exministro mencionó que su negativa presuntamente generó 'distancias' con la Presidencia y que el nombramiento de López habría sido una 'decisión directa' del Ejecutivo. Velasco defendió 'su inocencia' e indicó que las acusaciones en su contra se basarían únicamente en las declaraciones de Olmedo López y Sneyder Pinilla, a quienes calificó como “delincuentes confesos” que buscarían 'beneficios judiciales'. Refirió en que no habría gestionado contratos ni recursos y pidió que se le permita 'defenderse en libertad', recordando un antecedente de 'detención injusta' en su contra. La magistrada del caso anunciará el 18 de diciembre si acoge la solicitud de medida de aseguramiento contra ambos exministros.
Y en medio de la controversia por el escándalo, W Radio reportó imágenes en las que se vería a Carlos Ramón González, exdirector de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) y hoy prófugo de la justicia colombiana por el escándalo de corrupción en la Ungrd, presuntamente participando en una celebración vallenata en Nicaragua. El evento, denominado “Noche Vallenata”, se habría realizado el 11 de diciembre en el Teatro Nacional Rubén Darío y supuestamente habría sido promovido por la Cancillería de Colombia. Según el medio, González (señalado como uno de los cerebros del desfalco) habría asistido a la celebración, que habría tenido entrada libre y más de 200 asistentes, y luego se habría retirado 'sin restricciones', amparado por el asilo otorgado por el gobierno nicaragüense. La difusión del video generó nuevamente amplias reacciones políticas. El ministro del Interior, Armando Benedetti, dijo que se habría enterado por la prensa y que pediría explicaciones, mientras desde la oposición se responsabilizó al gobierno por permitir la fuga. Daniel Briceño (Centro Democrático) cuestionó a la Fiscalía y Andrés Forero (Centro Democrático) señaló al Ejecutivo por la salida del exfuncionario del país. A su vez, la representante Jennifer Pedraza (Dignidad y Compromiso) calificó el hecho como una “vergüenza” y anunció denuncias contra la Cancillería y el embajador en Nicaragua, mientras Lucha Garzón (Alianza Verde – En Marcha) advirtió que, de confirmarse apoyos diplomáticos a personas con cuentas pendientes con la justicia, se estaría 'burlando' al sistema judicial colombiano.
Este martes, 16 de diciembre, se reportó que la Fiscalía General de la Nación, liderada por Luz Adriana Camargo, investiga si funcionarios de la Embajada colombiana en Nicaragua incurrieron en un posible favorecimiento al asistir a la fiesta con Carlos Ramón González. La Procuraduría también abrió indagación y solicitó información a la Cancillería, cuestionando que los diplomáticos 'no alertaran' a la Interpol. También se conoció que el evento se habría realizado en el Teatro Nacional de Nicaragua como parte de la Noche Vallenata, mientras el Gobierno Nacional niega haber gestionado el asilo de González y solicitó en semanas pasadas su extradición. La Embajada de Colombia en Nicaragua negó cualquier participación directa en el evento a la que asistió el prófugo González. Según el comunicado, su rol se habría limitado a 'promocionar' el evento entre la comunidad colombiana y el cuerpo diplomático, 'sin invitar ni facilitar' la asistencia de Carlos Ramón, y que los diplomáticos no tendrían autoridad sobre eventos públicos en Nicaragua. El Presidente Gustavo Petro ordenó a la Cancillería 'retirar de sus cargos' a los funcionarios diplomáticos que habrían organizado o promovido la celebración, mientras la Cancillería abrió una investigación disciplinaria que pretendería 'establecer responsabilidades' dentro de la Embajada de Colombia en ese país. El reporte continúa en desarrollo.
Vía: Infobae • El Universal • W Radio • La Silla Vacía
