El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió a Rusia de que si en 50 días no se logra un 'acuerdo de paz' con Ucrania, impondría aranceles del 100% a países que comercien con este, una medida conocida como "aranceles secundarios". Esta política afectaría a terceros países como India si continúan comprando petróleo ruso, lo que impactaría indirectamente la economía rusa al limitar sus ingresos externos. Trump dijo estar “muy descontento” con el Presidente de Rusia Vladimir Putin, al mencionar que esperaría un acuerdo desde hace dos meses. Además, Trump también ha anunciado el envío de armas avanzadas a Ucrania en coordinación con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Indicó también que EEUU no pagaría por el armamento, sino que sería fabricado por su industria y costeado por los países receptores. El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, aseguró que Europa incrementará su gasto en defensa al 5% del PIB, como lo exigió entonces Trump, y confirmó que Ucrania recibiría 'grandes cantidades' de misiles, municiones y sistemas de defensa aérea.
El presidente ucraniano Volodímir Zelensky dijo agradecer a Trump por su apoyo y agregó que Ucrania estaría dispuesta a 'trabajar intensamente' por 'paz duradera'. Ambos mandatarios acordaron mantener comunicación frecuente. Mientras tanto, Trump ha dicho que habría intentado mediar con Putin en múltiples ocasiones, pero que las negociaciones no habrían producido resultados concretos. “Las palabras ya no sirven” si los ataques continúan, consideró. A pesar del anuncio de Trump, la Bolsa de Moscú reaccionó al alza, sugiriendo que los mercados esperarían sanciones aún más grandes, según reportes de medios. Desde el Kremlin (Rusi no hubo respuesta inmediata, aunque el senador ruso Konstantin Kosachev minimizó el anuncio calificándolo de “mucho ruido y pocas nueces”. No obstante, refirió que en los próximos 50 días podrían cambiar 'muchos factores' en el conflicto.
A propósito de aranceles de EEUU, el presidente de Brasil, Lula da Silva, firmó un decreto que reglamenta la Ley de la Reciprocidad, aprobada en mayo, para responder a posibles aranceles del 50% que Trump planea imponer a productos brasileños. Esta ley permitiría aplicar contramedidas comerciales y diplomáticas. El decreto establece mecanismos de protección económica y consultas diplomáticas previas que intentarían soluciones negociadas antes de sancionar. El gobierno brasileño también se reuniría con exportadores para analizar el impacto de los aranceles y definir estrategias. Brasil cuestiona los motivos de Trump, quien argumenta un presunto superávit comercial y el proceso judicial contra el expresidente Jair Bolsonaro (para más contexto, buscar en este blog). Sin embargo, estadísticas oficiales mostrarían que EEUU mantendría un saldo favorable en la relación comercial desde hace 15 años. En otras noticias sobre aranceles, EEUU impuso un gravamen del 17% a la mayoría de los tomates frescos importados desde México, tras retirarse del Acuerdo de Suspensión de la Investigación Antidumping de 2019, que permitía exportar sin pagar estos impuestos. Aunque inicialmente se había anunciado un recargo del 20,91%, finalmente se fijó en 17%. El secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick, argumentó que la medida pretendería proteger a agricultores locales de 'prácticas comerciales desleales'. México, principal proveedor del 90% de los tomates que consume EEUU, buscaría ahora mitigar los efectos. La Presidenta Claudia Sheinbaum dijo que el país no dejaría de exportar debido a una alta demanda estadounidense, aunque no detalló acciones concretas en apoyo de productores, principalmente en Sinaloa y Sonora. El reporte continúa en desarrollo.
Vía: BBC • AFP • DW • EFE • Correio Brazilienze • AP
